El papa Francisco está más decepcionado con la “casta” que Javier Milei

«El escenario social y económico es realmente inquietante, se ha pulverizado el poder adquisitivo, a este ritmo la calle se va a poner caliente y la clase política no demuestra ningún grado de empatía”, suele comentar el Sumo Pontífice. Enojado con el oficialismo y Juntos por el Cambio.

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Por Beto Valdez.

La información que le llega de los obispos le genera cada vez más preocupación. “El escenario social y económico es realmente inquietante, se ha pulverizado el poder adquisitivo de los que viven de planes sociales y crece la pobreza entre los trabajadores en relación de dependencia, a este ritmo la calle se va a poner caliente y la clase dirigente no demuestra ningún grado de empatía”, dicen a MDZ que es el mensaje que llega a oídos del papa Francisco.

Ni hablar del disgusto del jefe del Vaticano respecto a la pelea interna en el Frente de Todos por el acuerdo con el FMI. Teniendo en cuenta que Jorge Bergoglio hace meses que, por su enojo, decidió cortar el diálogo con Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, ahora el malestar se agudizó por lo que considera un “tremendo gesto de irresponsabilidad”. Encima le afecta mucho más porque hizo gestiones personales con Kristalina Georgeva y el presidente Joe Biden para acercar posiciones y evitar un default con el FMI. Sin dudas, el mayor disgusto lo tiene con la vicepresidenta y su hijo Máximo. “Le molesta que privilegien sus posturas políticas personales y compliquen la gestión del único funcionario con el que tiene diálogo, como Martin Guzmán”, dicen fuentes eclesiásticas.

La dura puja dentro del oficialismo no solo provocó más enojo en Santa Marta, sino además un enorme desconcierto en el episcopado. Hace un pare de semanas hubo una reunión entre los obispos de mayor peso para analizar la crisis y las diversas hipótesis sobre las eventuales consecuencias. Algunos de los presentes se habían entusiasmado en el inicio de la gestión de Alberto. Miraban con simpatía al FdT pero ahora están cada vez más decepcionados.

El malestar de los prelados que es compartido por el Papa apunta esencialmente al oficialismo pero también incluye a Juntos por el Cambio, coalición con la que no se llevaron nada bien durante la administración de Mauricio Macri. “El PRO y la UCR tampoco tienen proyectos alternativos y encima no han mostrado un solo gesto de grandeza o empatía con la gente, están en su interna y lucha de egos igual que el oficialismo”, sostienen cerca de Papa. “Ni siquiera quiere recibir a sus viejos amigos del sindicalismo, solo conversó telefónicamente con la esposa de Esteban Bullrich para interiorizarse de su estado de salud», agregan las fuentes.

 

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