Alberto Fernández negó arbitrariedades en la distribución de la obra pública durante el kirchnerismo

El presidente de la Nación defendió a Cristina Kirchner. Reveló, además, que conoció a Lázaro Báez pero no lo trató. Y tuvo un tenso cruce con uno de los fiscales presentes. 

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El presidente Alberto Fernández declaró como testigo en el juicio que enfrenta Cristina Kirchner por supuesto direccionamiento de la obra pública en favor de Lázaro Báez. Defendió a la vicepresidenta, al plantear: “Nunca hubo distribución arbitraria de la obra pública”.

El mandatario dijo con críticas al expediente que le llama “la atención el sentido de la causa”, al declarar que “se discuten decisiones políticas no judiciables”. Expresó que “no existe ninguna norma que defina cómo se distribuye el gasto en obra pública en el Presupuesto”.

Alberto Fernández señaló que “nunca hubo una distribución arbitraria” de fondos y que “es muy difícil hacerlo en un Presupuesto, porque todas las provincias pelean por su parte”.

Alberto Fernández sostuvo que no hubo instrucciones de los expresidentes Néstor y Cristina Kirchner para asignar fondos para obra pública de manera específica a la provincia de Santa Cruz o para beneficiar a algún empresario en particular: “Definitivamente no”.

Además, consideró que “pensar que un jefe de Gabinete está al tanto de todo es un disparate” y que en ese cargo se ven “los grandes números, lineamientos políticos, y ver que eso se cumpla”.

Por otro lado, descartó que haya habido un “acuerdo de voluntades” para direccionar obra pública en la provincia de Santa Cruz en los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. Aclaró que en el Estado “hay delegación” de funciones y “no existe posibilidad de que el Presidente pueda conocer cada obra pública”.

Alberto Fernández declaró ante el Tribunal Oral Federal Nº 2 en un debate que se realiza de manera semipresencial, con los jueces, testigos y un secretario en la sala y las restantes partes conectadas a través de la plataforma Zoom por la pandemia.

En esta causa por presunta corrupción en la obra pública la Justicia acusa a la exmandataria de favorecer con millonarios contratos a Austral Construcciones, de Báez, con 51 licitaciones públicas para obras viales en la provincia de Santa Cruz, por más de $46.000 millones.

Según se supo, en el juicio por la obra pública la estrategia de la defensa de la Vicepresidenta es descargar la responsabilidad de esos actos administrativos en quienes eran los jefes de Gabinete de la entonces mandataria, entre estos el propio Alberto Fernández.

Previo a la presentación de Alberto Fernández declararon en el juicio el procurador del Tesoro Carlos Zannini y el exjefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina.

Es la primera vez que un Presidente declara como testigo en un juicio oral en el que la principal imputada es su vice.

Se espera para las próximas semanas la declaración del titular de la Cámara de Diputados Sergio Massa, el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, y el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández. Todos exjefes de Gabinete.

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